Espuma limpiadora especialmente diseñada para la higiene diaria de las pieles grasas, que contribuyen en mantener bajo control la producción sebácea gracias a su formulación a base de ácidos salicílico y mandélico.
Otorga una agradable sensación suave.
Ayuda a mantener la hidratación y equilibrio.
Permite eliminar impurezas y restos.
Con propiedades antibacterianas y fungicidas.
Purifica y limpia los poros.
Con ingredientes cuidadosamente seleccionados.
No comedogénico.
Libre de alcohol.
Formato con dosificador.
Posee una textura de mousse.
Aplicar la espuma sobre la piel seca de rostro y cuello, extendiendo una fina capa. Dejar actuar durante un minuto y aclarar masajeando con abundante agua fría. Evitar los ojos y mucosas.